20 de julio de 2015

¡QUÉ BOQUITA!

Santiago Salazar, jugador santiagueño, reclamó una falta y se acordó de la madre del arbitro Gerardo Montarce. El refer, como la mayoría del estadio, lo escuchó clarito y metio la mano en el bolsillo: el resultado fue ¡una amarilla! Polémico fallo (como toda la tarde) del juez de Quitilipi.

No incidió en el resultado final y hay que decirlo. Pero la tarea de Montarse y sus asistentes en Juventud-Instituto de Santiago no fue del todo buena con varios fallos equivocados. Así como tenía que haber echado a Santiago Salazar de Instituto Santiago, la misma sanción había que caberle al arquero Agustin Sorribas que le cometió una falta fuerte a Andres Saavedra llevándoselo puesto cuando este iba camino al arco y terminó de mandarlo al hospital, aun cuando este venia algo descompensado de minutos antes. Quien si fue expulsado de la cancha es Eduardo Lugones, AC del equipo santiagueño por meterse en el campo de juego sin autorización del árbitro. Tuvo que ser sacado por la policía.  



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