7 de diciembre de 2015

Hasta las manos

Diego Ojeda atajó dos penales y desde el arco le dió el título a Juventud Unida. Le detuvo nada mas y nada menos que a Cristian Alderete, un especialista en la cuestión. Luego de algunos cuestionamientos que llegaron hasta no hace muy poco, Makanaki demostró en la cancha qué clase de cuidapalos es.

Como todo jugador de fútbol, tuvo partidos buenos y malos y cuando llegaban estos ultimos el castigo del exitismo del hincha no se hacia esperar, a veces tan exagerado que rondaba el ridículo.

Sin embargo, Diego Ojeda siguió allí y fue uno de los 12 o 13 jugadores que quedó a bancarla para intentar zafar del descenso en el Federal B. Lamentablemente no se pudo, pero llegó esto, una caricia al alma y lagrimas en los ojos que se multiplicó en todos estos players.

El destino quiso una vez mas que una final con Libertad termine en penales luego de tres partidos de 90'. Y esta vez no fue el Bocha Caro sino Makanaki Ojeda quien, con una rodilla algo complicada, se vistiera de héroe para arrastrarse un par de veces bajo los tres palos y atajar dos disparos, a Leo De Krogslund y Cristian Alderete, un especialista en la cuestión quien hace 11 años no erraba en los tiros desde los 12 palos.

En 2011 lo toco sufrir a Juventud vistiendo la camiseta del Ciclón, esta vez el hombre de Villa Minetti la alegría la vive de adentro y con el sabor extra de haberse metido en la larga lista de jugadores que hicieron historia y en el corazón del hincha del Rojo, con todo lo que ello significa.









No hay comentarios:

Publicar un comentario