La historia vuelve a repetirse. Un nuevo jugador que no reacciona tirado en el piso y la ambulancia ausente. Alderete está a salvo.Cuando transitaban los últimos minutos de Libertad 2-Obreros 0, Cristian Alderete cae abatido al piso y queda estático. Jugadores y árbitro se acercan de inmediato y el jugador no se mueve. Las camisetas comienzan a formar un ventilador humano a su alrededor para darle un poco de aire a Cristian mientras la enfermera Noemí Brandan llega corriendo desde el otro sector de la cancha. Se sube al estomago del jugador y los masajes cardiacos, trabajos de reanimación son en vano. El jugador no reacciona.
Rápidamente el espanto se apoderó de todos y dirigentes y colaboradores del club abren el portón grande de la cancha. Entra una camioneta blanca de alguien que andaba por allí que hace de ambulancia. "Llamá al 420..." le dice Santiago Sanchez, presidente del club, a su hijo utilero del equipo. Lo cargan y una mujer, familiar del jugador, presa de su desesperación se sube también al vehiculo dificultando la tarea de los profesionales pero la entienden y la dejan que suba. La ambulancia trucha emprende viaje hacia la clínica ante el aplauso de los hinchas que piden por la recuperación de Alderete.
Antes de llegar a la clínica, el jugador reacciona y Cristian Alderete y todo Libertad vuelven a vivir luego de sufrir con un nuevo capitulo de esta repetida historia de terror que hemos dado en llamar “Susto y Pánico”.
El jugador quedó internado en observación a la espera de los estudios y posterior parte medico. Ya le había ocurrido algo parecido hace un tiempo relacionado a este tipo de desvanecimientos y los estudios en su momento negaron alguna vinculación con enfermedades cardiacas. Esperamos novedades.
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